Siete amigos de toda la vida proponen un juego que pondrá sobre la mesa sus secretos más ocultos.
No Damos Crédito presenta la adaptación teatral del último gran éxito de taquilla del cine italiano: ‘Perfectos desconocidos’
Y tú, ¿te atreverías a compartir todo lo que llega a tu móvil durante una cena?
Vivimos tiempos en los que la dependencia del teléfono móvil se ha convertido en algo enfermizo. Si alguna circunstancia nos aparta temporalmente de él nos sentimos inquietos, aislados, desprovistos de la más básica de las herramientas.
Al mismo tiempo, como en las peores adicciones, cuando vuelve a nuestras manos nos aturde con su constante demanda de atención y nos vemos luchando por no caer en la inmensa superficialidad de lo banal, en el vacío de lo instantáneo y lo maquillado.
Sobre maquillaje y sobre una vida de cara a la galería también habla esta obra. Porque reducir este guión a una historia sobre las particularidades de la era digital sería quizás algo injusto.
Utilizando el pretexto de la tecnología, el argumento se adentra en un cuestionamiento de la privacidad, la intimidad y la confianza en las relaciones entre personas. A modo de juego, nos plantea un escenario en el que esa delgada caja de metal y plástico ha acabado por saber más de nosotros mismos que nuestras parejas, amigos íntimos,
familia…
Acompáñennos en esta noche de eclipse. Puede que la luna aproveche la ocasión y nos permita ver su cara oculta. Corresponde a nosotros decidir cuál preferimos, si la reluciente y perfecta o la oscura y desconocida.